LA
RELACIÓN MAESTRO-ALUMNO PARA GENERAR AMBIENTES DE APRENDIZAJE
Si
enseñamos a los estudiantes de hoy como enseñamos ayer, les estamos robando su
mañana. John Dewey (1859-1952)
En la actualidad, la educación se ha enfocado
en buscar el desarrollo de individuos capaces de ser económicamente productivos,
y tener cabida en la sociedad del siglo XXI, motivo por el cual muchos países
del mundo, están preocupados en las reformas educativas, buscando los
contenidos adecuados que dirijan al niño hacia los objetivos que la sociedad
demande.
La
RIEB reconoce, como punto de partida, una proyección de lo que es el país, y lo
que queremos que sea, mediante el esfuerzo educativo. Por lo cual culminó un
ciclo de reformas curriculares en cada uno de los tres niveles que integran la
educación básica, aportando una propuesta formativa pertinente, significativa,
congruente, orientada al desarrollo de competencias y centrada en el
aprendizaje de los estudiantes.
Motivo
por el cual el plan de estudios vigente (RIEB 2011), busca egresar estudiantes
que posean competencias para resolver problemas; tomar decisiones; encontrar
alternativas; desarrollar productivamente su creatividad; relacionarse de forma
proactiva con sus pares y la sociedad; identificar retos y oportunidades en
entornos altamente competitivos; el aprecio por la participación, el dialogo,
la construcción de acuerdos y la apertura al pensamiento crítico y propositivo.
Para la transformación de nuestro sistema
educativo se toman en cuenta diversos factores, tales como los contenidos, los
estándares curriculares, aprendizajes esperados, autoridades educativas,
maestros, padres de familia, alumnos. Sabemos que algunos de los aspectos le
competen a las autoridades educativas, pero el trabajo primordial, el que se
lleva a cabo en el campo, el día a día, recae en maestros, alumnos y padres de
familia.
Como mencionaba el filósofo, pedagogo y
psicólogo John Dewey debemos de buscar las estrategias de las cuales obtengamos
mejores resultados en beneficios de nuestros niños.
Sabemos que como maestros debemos estar
vigentes en el área que nos corresponden, debemos de ser perceptivos a los
cambios que nuestra sociedad exige a nuestros alumnos y a las necesidades que ellos
presenten. En base a esto debemos de ser aportadores de enseñanza
necesaria para nuestros niños, crear
ambientes que estimulen su ascenso como individuos.
El plan de estudios nos muestra cada uno de los
aspectos que como docentes debemos de abarcar y así mismo no dirige hacia el
sentido de la educación básica. Pero el verdadero sentido del aprendizaje en
cada niño se enriquece en y con la interacción social y cultural, con retos
intelectuales, sociales afectivos y físicos en un ambiente de trabajo
respetuoso y colaborativo.
Es por ello que nuestra participación docente
debe estar cimentada en 4 principios pedagógicos que el plan de estudios nos
expresa:
Centrar la atención en
los estudiantes y en sus procesos de aprendizaje
Aquí debemos reconocer que
cada estudiante cuenta con aprendizajes para compartir y usar es por esto que
el centro y referente fundamental del aprendizaje es el estudiante. Debemos
generar su disposición y capacidad de continuar a lo largo de su vida. Debemos
comprender como aprende en este sentido, debemos reconocer la diversidad social
cultural, lingüística, de capacidades, estilos y ritmos de aprendizajes que
tienen.
Planificar para
potenciar el aprendizaje
Los docentes consideramos el
momento de planificar como un acto tedioso y sin sentido, mas sin embargo es el
tiempo y el espacio para pensar, anticipar, organizar y articular el marco
teórico y las situaciones vinculadas con las practicas a concretar, también
permite modificar si es necesario lo seleccionado. Es por ello que la
planificación es un elemento sustantivo de la práctica docente para potenciar
el aprendizaje de los estudiantes hacia el desarrollo de competencias
Trabajar en
colaboración para construir el aprendizaje
El trabajo colaborativo alude
a estudiantes y maestros, y orienta las acciones para el descubrimiento, la búsqueda de
soluciones, coincidencias y diferencias, con el propósito de construir
aprendizajes en colectivo.
Generar ambientes de
aprendizajes
Lo consideramos al espacio
donde se desarrolla la comunicación y las interacciones que posibilitan el aprendizaje.
En la construcción de los
ambientes de aprendizaje destacas los siguientes aspectos:
·
la claridad respecto de
lo aprendizaje que se espera logre el estudiante,
·
el reconocimiento de
los elementos del contexto: historia del lugar, las prácticas y costumbres, las
tradiciones, el carácter rural, semi rural o urbano del lugar etc.
·
la relevancia de los
materiales educativos.
·
las interacciones entre
los estudiantes y el docente.
Desde un punto de vista personal el alcance de
cada uno de los aspectos que el plan de estudios nos sugiere se basa en el último
punto mencionado, que son interacciones entre los alumnos y maestros.
Por ello
debemos tomar como parte importante esa interacción y transformarla en algo
más, en un relación, La
relación docente alumno es la base de la educación, “Un profesor afecta hasta
la eternidad; no se puede decir cuando termina su influencia, Henry Brooks
Adams (1838-1918)”. Cada palabra cada gesto, cada acción, cada
estrategia que uno como maestro incluya dentro de una sesión de clases marcara
la vida de nuestros los alumnos.
Como
docentes debemos mejorar el trato hacia nuestros alumnos o en aquellos niños con
los que entramos en contacto. La sociedad es cambiante y vivimos en una sociedad
interesante pero difícil, donde tenemos acceso a tanta información que el
sentido común a quedado relegado, olvidado, a tal grado que nos cuesta trabajo
resolver cuestiones muy sencillas.
La era de la información a contribuido a una
ruptura emocional en la relación docente- alumno en cada de las aulas del país.
Al entrar en contacto por el fácil alcance a una computadora y a lo maravilloso
que es el internet, nuestros alumnos pasan por alto las indicaciones que
nosotros como maestros presentamos en cada una de las sesiones, esto se debe a
que la informacion que se comparte la puedan obtener tan solo con oprimir una
tecla; esta situación ha creado una frívola relación educativa, donde los
alumnos no valoran la educación y nosotros como maestros, permitimos esas
actitudes, ya que no visionamos el futuro para nuestra profesión, y no
recordamos la esencia de ella. “Una
prueba de lo acertado de la intervención educativa es la felicidad del niño. María
Montessori (1870-1952)”.
No podemos educar a los niños del siglo XXI,
con estrategias pasadas, no es que estas sean malas, sino que han sido la base de la evolución en el área de la
educación, pero debemos adecuarlas a tiempo actuales, sabemos que el mundo a
pasado por diferentes eras, desde la agrícola, la industrial, hasta en la que
estamos en la actualidad, en la que aún estamos confundidos, y algunos autores
le llaman la era de la tecnología y otros de la información.
Debemos
recuperar el poder de transformar nuestra civilización, el cual estamos
permitiendo se nos escape de las manos. Esa autoridad de crear en nuestros alumnos el valor moral
de crear, pensar, vivir. El papel de escultor social, lo estamos ignorando, le
quitamos el rol del cambio por nuestra apatía. Y esta autoridad no la
obtendremos, solo con leer más, o con exceso de
materiales educativos, de nada no servirá tener todo el material necesario
y todos los conocimientos, sino fortalecemos lo más importante en el proceso
del aprendizaje, que es la interacción entre los maestros y alumnos. “enseñar no es transferir
conocimiento, sino crear las posibilidades para su producción o su
construcción. Quien enseña aprende al enseñar y quien enseña aprende a
aprender”. Paulo Freire (1921-1997).
Frente
a una sociedad cambiante y compleja, que entre otros aspectos se caracteriza
por la incertidumbre, la escuela requiere abrirse y poner más atención en los
sujetos que aprenden, así como garantizar una educación de calidad para todos
mediante una base común de competencias, conocimientos y actitudes que permitan
al sujeto desempeñarse satisfactoriamente en la sociedad.
Atender
la diversidad supone un mejor conocimiento del alumno, fomentar su interés por
lo que aprende y hacer que lo mantenga durante y después de su escolaridad.
De ahí que formarse para la enseñanza adquiere
un gran significado: el profesional de la docencia será sensible para educar a
todos atendiendo sus diferencias individuales y culturales.
“La
enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza sino de
corazón a corazón. Howay G. Hendriks”
Bibliografía
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D.F.: PAX MEXICO.
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SEP. (2011). Plan de
Estudios 2011. Educación Básica. México, D.F.: CONALITEG.
Reyner Tovilla Pérez, docente frente
a grupo de educación física, egresado de la Escuela
Normal de Licenciatura en Educación Física de Tuxtla Gutiérrez; Chiapas 2002-2006 (Titulado), ha estado en cursos
de Capacitación de entrenador expedida por la Federación
Mexicana de Futbol Asoc., A.C. CURBASE 2ª. ETAPA; 11 de Julio de 2005, en el Primer Foro Estatal de Educación Física «Situación
Actual y Perspectivas de la Educación Física en Chiapas» Octubre de 2008, en
el X Congreso Internacional de Educación Física, Tapachula 2009, con una
duración de 50 horas, en el XI Congreso
Internacional de Educación Física, Tapachula 2010, con una duración de 50
horas, ha fungido como Juez del concurso
nacional de la Clase de Educación Física en el periodo
2012-2013, actualmente forma parte de las jornadas académicas de buenas prácticas
en educación física y deporte escolar.